Ajos, romero fresco, seis contramuslos de pollo sin piel y con hueso, cerveza, AOVE, sal y pimienta.
Pon los contramuslos salpimentados en una cazuela con aceite de oliva virgen extra y déjalos a fuego medio-alto sin moverlos para que marquen por ambos lados. Aparta y en ese aceite sofríe a fuego medio-bajo durante diez minutos muchos ajos picados con tres o cuatro ramitas de romero fresco muy picadito también. Agrega una cucharadita de maicena y remueve. Incorpora los contramuslos y un poco más de romero. Añade ahora cerveza (con o sin alcohol) hasta casi cubrir la carne. Deja destapada la cazuela para que vaya evaporando y reduciendo a fuego medio unos 30 ó 40 minutos aproximadamente o hasta que los contramuslos estén tiernos.